"I choose us..."

Es un enorme desafío porque tengo muchísima paciencia para casi todo, menos para este tipo de situaciones. Es ir, ladrillo por ladrillo, construyendo desde ahora. Y cómo cuesta. Y cómo duele. Porque es palpable, esta ahí, puedo sentirlo. Pero a la vez es un oasis. Es una droga, un analgésico, una gran dosis de anestecia. Y cuando se termina su afecto, se siente mucha sed. ¡Necesito más, quiero más! Pero, por ahora, es eso o nada...
Alguien que meta mano en las manecillas del reloj, por favor.